A partir de este episodio, Springfield se ha asentado a 8 kilómetros de la carretera después de lo que sucedió en el episodio anterior.
Homer pronuncia mal la palabra "Gimnasio" en este episodio. En lugar de decir "Jim" dice "Gim".
El abuelo dice que intentó The Murderhorn en 1928, 70 años antes del estreno del episodio.
Referencias culturales[]
El título de este episodio es una referencia a la serie King of the Hill, que se emitió en FOX desde enero de 1997 hasta septiembre de 2009 (con los últimos cuatro episodios transmitidos en bloque Adult Swim de Cartoon Network y algunos afiliados locales en 2010). Generalmente seguía a Los Simpson.
El yeti que aparece en la secuencia del sueño de Homer es una referencia a Bumble del especial de televisión Rudolph the Red-Nosed Reindeer (Rudolph the Red-Nosed Reindeer (especial de TV)) de 1964.
Errores[]
La lata sobre la bota de McAllister
Se dice que el Murderhorn tiene más de 6 kilómetros de altura. Esto es más alto que el Monte McKinley, que es la montaña más grande de los Estados Unidos. Probablemente sea una broma intencional que continúa con el chiste de que Springfield tiene una geografía imposible.
En el flashback, la lata de flapjacks parece estar apoyada en el pie de McAllister, pero está totalmente plana como si estuviera en el suelo.
Cuando los sherpas estaban arrastrando a Homer montaña arriba, vemos que sus jeans azules se desprenden y revelan calentadores térmicos beige debajo de ellos. Luego, los calentadores térmicos se sueltan y revelan la ropa interior de Homer. Luego, Homer se despierta y se da cuenta de que lo están arrastrando montaña arriba. Cuando se levanta lo vemos en ropa interior y subiéndose solo sus jeans azules; Los calentadores térmicos beige no estaban a la vista.
Cuando los dientes del abuelo se caen de su boca, encajan perfectamente en la mordedura de McAllister, revelando que fue el abuelo quien intentó darle un mordisco, tal como McAllister había registrado en su diario. Sin embargo, el abuelo no los tenía en ese momento y tenia sus dientes normales; por lo tanto no deben ajustarse perfectamente a la herida de esta manera.